11 diciembre 2017

Las zorras pequeñas

“Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas; porque nuestras viñas están en cierne.” (Cantares 2.15).
Somos muy dados a categorizar los pecados, pensamos  que un asesino, un violador o un ladrón cometen grandes pecados, y por otro lado creemos que una mentira, el rencor, la envidia o codicia por ejemplo, no son pecados. Y es que nos preocupamos de evitar esos “grandes” pecados para estar bien con Dios y en especial con nuestra conciencia, pero olvidamos los “pecaditos” que constantemente practicamos, sin tener el mínimo dolor de haberlos cometido, y sin reconocer lo que nos puede suponer.


Reconocemos que el adulterio la fornicación el robo, son pecados graves, pero nos olvidamos que él no perdonar, o hablar mal del hermano también lo es. Para Dios no hay pecado grande o pequeño, en su lenguaje pecado es pecado, independientemente de la forma de cómo nosotros lo veamos.
En esta historia vemos como Dios destruyo Sodoma y Gomorra, (Génesis 19.24-25), dice la Biblia que Dios hizo llover azufre y fuego desde los cielos;  y destruyó las ciudades, y toda aquella llanura, con todos los moradores de aquellas ciudades, y el fruto de la tierra.
¿Tan graves y gordos fueron los pecados de Sodoma para que el Señor tomara tan drástica medida?  La pregunta es: "¿Cuál fue el pecado de Sodoma y Gomorra?", Algunos dicen que era la homosexualidad, pero, no es bíblico decir que la homosexualidad fue la única razón por la cual Dios destruyó Sodoma, hay un  texto Bíblico que nos informa de los pecados de Sodoma.

Ezequiel 16.49.- He aquí que esta fue la maldad de Sodoma tu hermana: soberbia, saciedad de pan, y abundancia de ociosidad tuvieron ella y sus hijas; y no fortaleció la mano del afligido y del menesteroso. Ezequiel recordó a Judá, que a Sodoma la destruyeron por su soberbia, ociosidad, glotonería y por olvidar al necesitado que estaba a su alcance.
Como vemos aparentemente no eran “grandes pecados” pero al fin y al cabo pecado que destruyeron toda una ciudad.

Muchas veces comunidades cristianas, iglesias, grandes obras de Dios, y como no, hombres y mujeres nos cuidamos de no cometer de los llamados grandes pecados, pero nos olvidamos de que cuando nos sentimos orgullosos de tener abundancia de alimentos y de gozar de comodidad, y no ayudamos al pobre y al necesitado, son pecados que pueden destruir nuestra vida espiritual. Quizás estos pecados no sean tan estremecedores como los otros, pero también Dios los prohíbe

La única forma de detectar y atrapar a esas zorras es teniendo la suficiente humildad para reconocer los “pequeños” pecados que a veces estamos cometiendo y tratar de no cometerlos, claro que todo esto con la ayuda de Dios, quien siempre está dispuesto a ayudarnos, a fortalecernos y a darnos la capacidad para mejorar muchos aspectos de nuestra vida para que cada día podamos tratar de ser más agradables a Él.


Pienso que hoy es un buen día para analizar, pero sobre todo reflexionar sobre: ¿Cuáles son aquellas zorras pequeñas que están arruinando nuestros viñedos? Y tomar medidas al respecto, dice la Palabra de Dios que  no pequemos; pero que si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo. (1Juan 2.1)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ÚLTIMA ENTRADA PUBLICADA

El Dios de las segundas oportunidades

Hoy en día, si cometes un error, estás perdido. Un tweet incorrecto puede significar que tengas un grave problema. Un comentario irreflexivo...