Se relata un cuento sobre un hombre que quería fundar una nueva religión. Se fue a hablar con un viejo sabio para que le aconsejara como debería comenzar. El sabio le aseguró que lo primero era escribir las leyes de su nueva religión y entregárselas a sus seguidores.
" ¿ que debo de hacer después? " pregunto el hombre.
El anciano le dijo, " Después de eso, tu debes de permitir que te crucifiquen, morir y ser enterrado. Entonces al tercer día debes de resucitar y aparecerte a quinientas personas."
No es necesario decir que ningún ser humano podría tener tal poder sobre la muerte. Pero Jesucristo el hijo de Dios, si tuvo ese poder sobre la muerte. El vino a la tierra en la forma de un hombre y vivió 33 años. En sus últimos tres años predico el amor y el poder de Dios, sano a enfermos, y a aquellos que estaban oprimidos por la maldad.
El propósito que trajo a Cristo a la tierra fue el redimirnos, el pago el precio de nuestra redención con su propia vida. Pero Dios amó de tal manera al mundo que dio a Su Hijo unigénito, de manera que todo aquél que cree en El y lo acepta en su corazón, no sera separado de Dios sino tendrá vida eterna.
Así por tres años Jesús sano a los paralíticos, los ciegos, los sordos, limpio los lemprosos, y mas que todo limpio los espíritus de los hombres de todo pecado. Entonces los líderes religiosos de la nación condenaron a Jesús a morir en la cruz, porque estaban celosos de que las grandes multitudes amaban a Jesús y le seguían.
Ellos, sin pensar llevaron a cabo el gran plan de Dios para la humanidad, morir en la cruz por todos nosotros. Con su misión cumplida, Jesús resucito de los muertos y se apareció a todos sus discípulos y a centenares de personas que testificaron de verlo y hablar con El.
El ascendió a los cielos y sé fue a su reino celestial, para esperarnos a todo ser humano que acepte a Jesús como "el Salvador de hombres."
" ¿ que debo de hacer después? " pregunto el hombre.
El anciano le dijo, " Después de eso, tu debes de permitir que te crucifiquen, morir y ser enterrado. Entonces al tercer día debes de resucitar y aparecerte a quinientas personas."
No es necesario decir que ningún ser humano podría tener tal poder sobre la muerte. Pero Jesucristo el hijo de Dios, si tuvo ese poder sobre la muerte. El vino a la tierra en la forma de un hombre y vivió 33 años. En sus últimos tres años predico el amor y el poder de Dios, sano a enfermos, y a aquellos que estaban oprimidos por la maldad.
El propósito que trajo a Cristo a la tierra fue el redimirnos, el pago el precio de nuestra redención con su propia vida. Pero Dios amó de tal manera al mundo que dio a Su Hijo unigénito, de manera que todo aquél que cree en El y lo acepta en su corazón, no sera separado de Dios sino tendrá vida eterna.
Así por tres años Jesús sano a los paralíticos, los ciegos, los sordos, limpio los lemprosos, y mas que todo limpio los espíritus de los hombres de todo pecado. Entonces los líderes religiosos de la nación condenaron a Jesús a morir en la cruz, porque estaban celosos de que las grandes multitudes amaban a Jesús y le seguían.
Ellos, sin pensar llevaron a cabo el gran plan de Dios para la humanidad, morir en la cruz por todos nosotros. Con su misión cumplida, Jesús resucito de los muertos y se apareció a todos sus discípulos y a centenares de personas que testificaron de verlo y hablar con El.
El ascendió a los cielos y sé fue a su reino celestial, para esperarnos a todo ser humano que acepte a Jesús como "el Salvador de hombres."
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