“Escudriñad las Escrituras”

Me llego esta semana un post de un famoso pastor que recomendaba a su audiencia que no era tanta la importancia del conocimiento que con solo creer era suficiente. Una de las mayores razones por las cuales los cristianos debemos tener conocimiento es estudiando la palabra de Dios, y encontramos esta exhortación en boca del mismo Señor Jesucristo ya que dijo: “Escudriñad las Escrituras”. Si nos damos cuenta sus palabras no sugieren una alternativa, sino que es un imperativo, es decir, una orden la cual es escudriñar la palabra de Dios. El termino escudriñar nos habla de una acción de estudiar diligentemente las Escrituras de tal forma que nuestro aprendizaje del mismo sea eficaz.

Cuando leemos en el libro de Hebreos 4.12 que dice: “La palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.”

Este poderoso versículo que encontramos en Hebreos, nos da varias razones por la cual no debemos ignorar nunca la Palabra de Dios o peor aún sentir indiferencia hacia ella. Veamos brevemente estas razones:

1.-La Palabra de Dios tiene vida y Eficacia (v.12a). Dios es vida por lo tanto la Palabra inspirada por Dios tiene vida también y perdura para siempre…es eterna. (Salmo 119.89).

Obviamente, la Palabra de Dios es vida y tiene efectividad como ninguna otra palabra. No hay forma que después de leer, escuchar y/o estudiar la Palabra de Dios, no haya cambios en nuestra vida. Si escuchamos la Palabra de Dios, la misma cambiará nuestra vida.

2.-La Palabra de Dios no solo tiene vida sino que penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu y en lo más íntimo de la persona y es más cortante que una espada de dos filos (v. 12b). La Palabra de Dios tiene el poder de penetrar hasta lo más profundo y traer convicción a la vida de las personas.

Como creyentes cristianos profundizamos en la Fe ante la presencia de Dios, nosotros debemos someternos al cirujano por excelencia para que examine nuestros corazones (Salmo 139.23-24). Él nos mostrará que es lo que hay que cortar para ser sanos, para tener salud, lo que se tenga que cortar.

3.-No solo la Palabra de Dios es vida y penetrante sino que también discierne (v.12c). La Palabra de Dios discierne y juzga nuestros pensamientos y las intenciones de nuestros corazones.

En nuestro corazón habitan muchos sentimientos y emociones, que tal vez puedan estar escondidas para las personas que no nos conocen, pero nada hay oculto ante Dios y en la medida que se lo permitimos Dios trabaja en nuestros corazones.

Seamos cristianos sabios y permitamos que la Palabra que penetra y discierne trabaje en nuestras vidas.

Dios nos pedirá cuentas, en el versículo 13 vemos que no hay nada oculto para Dios y que sus ojos están en todo lugar (Proverbios 15.3). Por esta razón no debemos ignorar la Palabra de Dios, pues algún día tendremos que darle cuentas a Dios de nuestra aplicación o falta de aplicación a su Palabra.

Por último la palabra de Dios nos advierte que todos aquellos que rechazan el conocimiento, dice que el Dios mismo les rechazará, sin importar quien sea: “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos” (Oseas 4.6).