Hagamos viral la Palabra de Dios.

Que irónico que todo relacionado con internet se haya visto señalado por volver a las personas más individualistas y distanciadas de la sociedad, que por otro lado tiene mucha razón. Pero que al día de hoy se hayan vuelto completamente en lo contrario. Hoy es una herramienta vital para comunicarnos en medio del “distanciamiento social” impuesto por muchos gobiernos en medio de la crisis del covid-19.

Unos de los términos que se usan mucho en internet es la palabra “viral” En internet cuando hablamos de viral queremos decir que es un contenido que se propaga muy rápidamente a través de los nuevos medios. El término viral proviene de la palabra “virus” porque el mensaje, como la propagación exponencial de un virus, se transmite expandiéndose muy rápidamente, de persona a persona, a través del principio del boca a boca o de los nuevos medios. Es decir, lo que hace que un contenido sea viral es, sin duda, el alto grado de participación que conlleva y la capacidad de “arraigarse” en una o más comunidades virtuales, que pueden transmitirlo rápidamente y, sobre todo, de forma gratuita.

Un ejemplo de todo esto lo tenemos en el “famoso” covi-19, que a diferencia de otros muchos virus ha tenido la particularidad  de esparcirse a una escala mundial y a una velocidad nunca ante vista. Esta propiedad de los virus hace que el concepto de viral se emplee en sentido simbólico para denominar a aquello que se propaga con mucha velocidad y de modo exponencial.

Siempre me ha impactado la forma en como Jesús comunicaba ya que, para la época que el vivió la oralidad era uno de los medios de comunicación que más se utilizaba. Jesús se adaptó a esa realidad y utilizo parábolas, analogías y otros recursos orales como medios para ilustrar verdades profundas y divinas.

Estoy convencido que Dios nos ha dado a los seres humanos una capacidad de adaptación y a los creyentes de manera especial para discernir y entender mejor los tiempos. Esa adaptación ha sido evidente en el cambio tan grande que ha habido por medio de la tecnología en los últimos tiempos. No sé si a este punto muchos todavía siguen resistiéndose al uso de la tecnología como un recurso para la evangelización, para llevar la palabra de Dios hasta el último rincón del mundo.

Hoy como nunca antes internet está inundado por el mensaje de la palabra de Dios, así como de personas en sus casas navegando por las redes sociales y sedientas por encontrar repuestas ¿casualidades? No lo creo. Más bien pienso que es un tiempo fascinante que Dios nos está permitiendo en el que podemos sobrepasar fronteras sin necesidad de movernos de nuestras casas y literalmente hacer VIRAL la Palabra de Dios en todo el mundo.

 Justo en este tiempo en que nos ha tocado vivir hay millones de personas encerradas en sus casas a quienes podemos alcanzar para sembrar una inquietud en su corazón y para motivarles a que lean la Biblia a que oren, pero sobre todo a que acepten c Cristo en su vida.

El evangelio debe seguir expandiéndose por toda la tierra. Comuniquémoslo de acuerdo a la realidad que estamos viviendo, usemos los medios tecnológicos a nuestro alcance para hacer VIRAL la palabra de Dios.

Somos llamados a esparcir la palabra de Dios por todo el mundo, así que manos a la obra y hagamos que la palabra de Dios se propague de forma rápida como un virus pero que en vez de hacer daño nos va a traer libertad, paz, compasión, misericordia, esperanza y salvación a las vidas de aquellos en el mundo que hoy mismo esta inmersos en el temor la incertidumbre y la desesperanza.  Hagamos viral la palabra de Dios.