Dad gracias en todo

Estamos llegado a final del mes de diciembre y es un tiempo apropiado para reflexionar en un año que termina, y nuestra pregunta es ¿Tenemos muchas cosas por las que dar gracias en el año 2009?

Si evaluamos este año sobre la base de lo que ha estado sucediendo en el mundo; el paro se desborda, corrupción en los partidos políticos, Afganistán una guerra sin fin, el cambio climático, la tierra se derrite y los mandatarios no se ponen de acuerdo, parecería que no tenemos muchas cosas por las que dar gracias.

Sin embargo, como pueblo de Dios, la base de nuestro enfoque a la vida no viene del mundo, sino de la palabra de Dios,

“Dar gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús”, (1Tesalonicenses 5.18).

Conozco a una persona que esta postrada en una cama del hospital, bastante enfermo. ¿Todavía puede esta persona dar gracias a Dios? Si, porque aunque esta en la situación que esta, no ha perdido el amor de su esposa, de su familia, de su hermanos espirituales que le visitan día tras día, y sobre todo del amor de Dios. Siempre que estamos juntos me anima ver que este hermano sigue dando gracias a Dios, a pesar de sus reverses.

Al reflexionar en el año 2009, doy gracias al Señor por permitirme ministrar en el Hospital, por ver como mi iglesia sigue prosperando espiritualmente, por ver milagros en la vida de hombres y mujeres cambiados por el amor de Dios en los Centros Penitenciarios, y por permitirme estar al lado de mi familia haciendo la voluntad de Dios.

Como pueblo de Dios podemos dar gracias incluso en circunstancias difíciles. Ser agradecidos no es solo un mandamiento, que hay que obedecer, sino también una actitud que resulta de nuestra relación con Dios. Nada en este mundo podrá robarnos el gozo de nuestra relación con Dios todopoderoso.